"A veces escribís cosas por catarsis y después te das cuenta de que no es lo que sentís". Sí, lo sé. Y a veces decís cosas por catarsis, y después te das cuenta de que no es lo que sentís. Y, lo que es aún peor, llegás a darte cuenta de que no tenés la más mínima idea de qué es lo que sentís o lo que querés. Y mirás para todos lados, buscando una respuesta (si la respuesta la tiene el corazón, lamento informar que decidió tomarse vacaciones de tanto que lo molestaron).
Catarsis.
Qué buen nombre para una película.
O para un libro.
lunes, 18 de enero de 2010
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